LA LUZ DE BALLABRIGA.

LA LUZ DE  BALLABRIGA.
Antonio; Conde Yndiano de Ballabriga

domingo, 13 de diciembre de 2015

El multipartidismo.





Antonio Pozo Indiano

Es el sistema pluralista de partidos en el que existen más de dos partidos. Pueden distinguirse  diversas variantes: tripartidismo , cuatrípartídismo , polipartidismo.

La tendencia al multipartidismo ordenado  es evidente , sobre todo en los países latinos.

Puede haber un multipartidismo ordenado y limitado y un multipartidismo anárquico y desordenado.

Las causas de que aparezcan esta pluralidad de partidos puede ser  de muy diversos tipos : claves sociales , grupos étnicos , diversidad de lenguas , grupos ideológicos , diferencias regionales ,religiosas etc.


El peligro del multipartidismo  es la anarquía, la multiplicación de partidos , que puede hacer imposible el gobierno , sobre todo si estos partidos son de ideología cerrada , impermeable y contrapuesta.

En un régimen de partidos multipartidistas  equilibrado  aparece como característica política  las alianzas de partidos en vistas de las elecciones.

Como ninguno de los partidos  tiene la posibilidad de alcanzar la mayoría absoluta , tiene que aliarse  con otros partidos.

En el juego de las alianzas pueden jugar un papel importante determinadas minorías que pueden inclinar la balanza  hacia aquella a la que le den los votos.


Cuando las alianzas  se hacen estables puede haber un bipartidismo real y un multipartidismo exterior.

La distinción entre bipartidismo y multipartidismo  es capital en la estructura  de los regímenes políticos , porque condicionan el problema de la mayoría de la Asamblea Nacional , fundamental en el régimen parlamentario , porque es la que elige al Gobierno y sobre la se apoya el gobierno.
En el bipartidismo la mayoría pertenece a un solo partido . Es homogéneo y estables .


En el multipartidismo ningún partido reúne la mayoría  y deberán hacerse alianzas entre partidos para alcanzarla. La mayoría nacida  de una alianza heterogénea ,dividida  e inestimable y en ella cada uno de los partidos tira de su lado .

Por otra parte el combate político es de distinta fisonomía  según sea entre dos adversarios o muchos.


El número de partidos no es el único problema. En el bipartidismo  la estabilidad y la homogeneidad del gobierno depende esencialmente  de la disciplina interior del partido mayoritario . Si la libertad de voto y opción es total dentro del partido , el gobierno tiene casi tanta dificultad para mantenerse y gobernar como un régimen multipartidista . Así el sólo verdadero bipartidismo  es el de tipo británico en el que se impone a los diputados  una obediencia en el voto


El peligro del multipartidismo  es la anarquía, la multiplicación de partidos , que puede hacer imposible el gobierno , sobre todo si estos partidos son de ideología cerrada , impermeable y contrapuesta.

Todo esto me lo enseñaron cuando tenía 17 años.

Antonio Pozo Indiano (Demócratas Españoles)

 

Texto José .M. Poveda Ariño

 


jueves, 10 de diciembre de 2015

La Libertad y su incorrecto ejercicio






Antonio Pozo Indiano


Si la libertad  es un atributo  sustancial del ser  humano , no cabe duda alguna  de que la libertad perfecta  es un gran ideal  , y que entre la libertad  que tenemos  y aquella a la que aspiramos  existe una gradación.

Los actos del ser humano  serán tanto más humanos , tanto más perfectos , tanto más dignos, cuanto mayor sea  la participación  de la libertad en ellos.
Deliberar es algo así como bucear en el seno de la libertad , pero definida la libertad  como fundamental afirmación  de un orden moral, la deliberación  será tanto perfecta  cuanto mayor sea el papel de la razón .

Como el ser humano  no vive aislado , en ese proceso de su desarrollo  y perfeccionamiento en que vive la vida humana  consiste , se encuentra con los demás humanos.

La vida humana es convivencia ; el medio natural  en que el ser humano  ejerce y desenvuelve  su personalidad  es la sociedad,  el grupo. De ahí  que en el ejercicio  de la libertad quepa hablar  de una responsabilidad individual  y de una responsabilidad colectiva , conjunta.

Si el ser humano es libre  , y la vida  en común,  la convivencia , exige un orden , resulta evidente  la relación entre libertad  y orden social .

La libertad  y ,por consiguiente , la responsabilidad , son algo atajadero no solo a la vida individual, sino a la colectiva.





El ser humano  busca su perfección personal  en la convivencia , y la comunidad progresa  a su vez  en la medida  en la medida en que busca la perfección  y el bien común . 
Como el ser humano  vive en el tiempo, también las colectividades  tienen su pasado , su presente y su futuro; y existe una conciencia social  que condiciona el comportamiento de todos y cada uno de sus miembros.
El orden social resulta  del perfecto ajuste  en ese juego de necesidades  y libertades , cuya pieza intermedia  es siempre la responsabilidad . De esta manera la libertad como atributo general, y la ley como exigencia  del orden social , como regla común , no pueden ser mutuamente opuestas. En un orden social  perfecto la ley será siempre  la mejor perfección de la Libertad.
Sólo en la vida en común  alcanzan la libertades individuales  su más adecuada regulación . El orden que toda ley establece  no sólo es mengua  para el uso de la libertad , sino condición clara para su cabal desarrollo. Pues la libertad no interesa , en definitiva , por si misma , sino por lo que nos permite  hacer . Ser libres , sentirse libres , pero no poder hacer nada  sería como no serlo. De ahí  el sufrimiento  de quienes,  por enfermedad , han de permanecer  en una cama , o de aquellos que , en las cárceles o prisiones , se encuentran privados de libertad .  Justo porque se sabe libre  y no puede ejercitar su libertad  es por lo que el se humano padece.





Es cierto que la libertad es un medio , no un fin . No hay libertad  en sí para nada , sino libertad para algo, para un fin .
La libertad individual tendrá siempre un limite mínimo ; el impuesto por el lógico  respeto a las libertades de los demás. En consecuencia , resulta socialmente necesario regular el uso de la libertad .
En el fondo, los problemas que plantea  la convivencia derivan  siempre del defectuoso  entendimiento de la libertad  y su incorrecto ejercicio.
Si el encuentro , el contacto de un ser humano con otro , puede parecer en primer término  como algo amenazador , es precisamente  porque , partiendo el ser humano  de su radical inseguridad , y necesitando compensarla  con la afirmación permanente  de su persona , instintivamente tiende siempre a ir más allá de lo necesario , sin tener en consideración  la idéntica problemática de los demás.
Así, la convivencia y la solidaridad como punto de arranque  de toda posible cooperación , será el resultado  del perfecto acuerdo entre la libertades individuales  y las colectivas.


En un orden social  perfecto la ley será siempre  la mejor perfección de la Libertad.

domingo, 6 de diciembre de 2015

La igualdad de todos los españoles en la vida nacional.







Antonio Pozo Indiano

Si la igualdad de la personas ante la ley  es postulado fundamental de toda justicia , la igualdad de los españoles en la vida nacional  viene exigida  por la misma justicia  y afirmada necesariamente  por todo programa de convivencia.

El orden justo , lugar común  de toda convivencia pacífica , es la labor conjunta  de gobernantes y gobernados . Sin él , cualquier empresa política carecería de sentido.

La promoción y defensa del orden justo está en la médula de la acción  política del Estado ; pero la exigencia  de la justicia social  implica el deber de cooperar a su satisfacción .

Los cauces están perfectamente  determinados . Los órganos de representación  de la instituciones naturales , familia , sindicato o asociación profesional- están abiertos para todos. Y lo mismo puede cooperarse  sirviendo fielmente la vocación política que exigiendo o criticando razonablemente.



LA DIFERENCIA DE FUNCIONES

Hablar de la sociedad y del deber de cooperar puede a veces parecer algo abstracto , como si la sociedad estuviese “ en el aire “ y los deberes  se albergaran  entre la letra de un aburrido  trabajo de Moral.  Pero la comunidad nacional que llamamos España  tiene una realidad tan viva  y concreta  como nosotros mismos .  Somos nosotros quienes la formamos.

La perfección de la comunidad  nacional como sociedad organizada  será  tanto mayor  cuánto más concretos  y diversificados  sean sus servicios  y funciones que sus miembros desempeñen.
Igual en la gestión política  directa que en la administrativa , o en la simplemente  profesional o privada . Y dentro  de cada gestión , en diversas especies de funciones.

Las necesidades en todos los órdenes  son numerosas . Bienes materiales , sociales y culturales que promover , producir y administrar.

Todos los órganos e instituciones  del Estado desempeñan funciones propias.

Pero también la sociedad  y las personas particulares , con independencia  de sus posibilidades representativas , han de desempeñar  funciones ordenadas a la perfección  de la comunidad nacional , pues la promoción  de toda clase de bienes  les pertenece , naturalmente . El aumento de la riqueza , las realizaciones sociales  y la evaluación cultural  son funciones en las que el Estado  sólo puede intervenir subsidiariamente. Y ha de ser en torno a las empresas y a la agrupaciones sociales menores como se han de articular dichas funciones.



INTERÉS POR LOS PROBLEMAS GENERALES

No puede interesarse por el bien de todo quién no se sienta , por encima  de cualquier eventualidad o resultado , miembro del conjunto. Para la solidaridad reza el dicho de que “ Hay que estar a las verdes y a las maduras “. Lo contrario es egoísmo.
Participar en la vida  y los bienes de la comunidad  como exigencia social jurídicamente  reconocida supone , solidariamente  cuando menos , interés por los problemas generales.

Como problemas generales , nos afectan ;  y si nos afectan , forzosamente , poco o mucho , nos han de interesar . La falta de interés , la indiferencia  por los problemas comunes , sobre poner al desnudo el defecto  de la insolidaridad , es causa de retraso  en todos los órdenes.

Por último , no se puede olvidar que , a medida  que la conciencia social progresa , el aislamiento se hace cada vez más difícil . El interés propio  y el general y colectivo se encuentran íntimamente enlazados.

En la gran empresa de la Convivencia nacional no puede dejar de  haber

Intereses comunes.


Para la solidaridad reza el dicho de que “ Hay que estar a las verdes y a las maduras “. Lo contrario es egoísmo.

viernes, 4 de diciembre de 2015

La Convivencia Nacional







Antonio Pozo Indiano

Desde la proyección íntima  y familiar  a la unión en la superior empresa  de la Patria  las personas  recorren en su  crecimiento  y desarrollo toda una serie  de variadas formas  de asociación , donde naturalmente , se encuentra . La Familia , el colegio , la asociación juvenil , la comunidad profesional , el municipio , representan , por decirlo así , los espejos donde  sucesiva o simultáneamente  se proyecta su figura.
En la cima de todas las formas  de agrupación humana , la sociedad civil . constituida a través  del proceso histórico en ciudad , primero, y nación  después , representa  la máxima unidad de convivencia .


Ya sabemos los es la Patria  , pero convendrá recordarlo .  La Patria es una síntesis  de vidas , de afanes, de ilusiones, donde las personas , desde hace muchos siglos , se vienen  empeñando  en un estilo común  y unos fundamentales acuerdos .
Podrán variar  en muchas cosas  , podrán hasta sentirse enemigos ; pero aún  en el perfil de la enemistad  y , sobre todo , en lo esencial , sin siquiera darse cuenta , de ordinario piensan y actúan lo mismo.

Nuestra Patria es España , madre común  de todos los que fueron , de los que somos y de quienes han de seguir nuestros pasos. Nos gustará mucho o poco , puede que nos disguste a rato , pero es nuestra , y es lo más en común  que tenemos todos.

Por eso la Patria  representa  la más alta unidad de convivencia : familias y pueblos , gente de  todas las edades  y profesiones , personas sanas y fuertes, y enfermas y débiles , todos unidos gracias a la identidad de su actitud  frente a lo fundamental , en una común tarea de servicio.

Esta tarea  es de todos . Es un error pensar que las personas  pueden encerrarse en si mismo . Tarde o temprano, el egoísta acaba quedándose solo . Su empeño  conduce siempre al aislamiento  y la ineficacia . ¿ De qué les serviría  al sabio su saber  o al rico su riqueza  si de repente  quedarán abandonados de todos?
Si la convivencia nacional es el principio y el fin del orden justo , su perfección bien merece el empeño de todos.

Pero un equipo no es simplemente una suma , un montón de personas . Para que un grupo de personas  puedan funcionar en equipo  necesitan conjuntar sus esfuerzos  y sus posibilidades de una manera ordenada. En el verdadero equipo cada cual tiene una misión concreta y , sobre ella , una labor de conjunto .
En cualquier nación en la nuestra, por ejemplo , podemos comprobar cómo junto a la actividad personal  y diferenciada de sus ciudadanos – misión concreta – hay además algo  que , sin menoscabo  de está , los configura como conjunto . Ese algo servido con determinado  estilo enraizado  en ciertos principios fundamentales  en su misión histórica.
Nuestra misión como españoles , es servir a esa misión.



Nuestra misión es, ante todo , una empresa de unidad . La unidad de España  es la más antigua  unidad nacional que se hizo en Europa.

Por nuestra unidad fuimos un pueblo culto , una nación fuerte , capaz de incorporar , todo un mundo nuevo a la unidad de la fe y de la cultura occidental .

La unidad  es la condición indispensable  de la grandeza de la Patria . Pero la grandeza de nuestra hora  no puede ser una magnitud geográfica . Ya nadie es grande por eso . España necesita  progresar materialmente , acrecentar su exigua renta , levantar a sus pueblos y ciudades , industrializarse , modernizarse . Hay mucho temple  y muchas virtudes humanas  dormidas  que urge despertar .

Y con la unidad y la  grandeza , la libertad y la dignidad de todas las personas. Pocos pueblos ha habido  y hay tan celosos de la dignidad humana como el español.  La Geografía y la Historia  nos han servido  a manos llenas el caudal de nuestro estilo  y de nuestro carácter.
Amor a la independencia , sobriedad , virilidad, desprecio de lo perecedero  y afirmación de lo inmortal .



Nuestra Historia esta llena  de hechos magníficos y  de ocasiones  malogradas . Nuestros fallos dependen casi siempre del descuido de los valores colectivos, de la falta de solidaridad.


He aquí cómo en la gran misión  de los españoles  de hoy la convivencia nacional- exigencia del bien común – y la lucha personal contra la insolidaridad han venido a perfecto acomodo , ilustrando la necesidad y obligatoriedad de cooperar en esta tarea. 



          La unidad  es la condición indispensable  de la grandeza de la Patria